martes, 31 de julio de 2012

Lector Ideal


"Cuando oigo que un hombre tiene el hábito de la lectura, estoy predispuesto a pensar bien de él." Nicolás de Avellaneda



Desde niña que disfruto viajar por las páginas de un buen libro, luego comencé a disfrutar el darle vida a mis propias historias, y aunque aún no he finalizado ninguna, eso no significa que no pueda darle uso a herramientas que utilizan escritores de todas las tallas. Por este motivo, en el artículo de hoy, me quiero referir al lector ideal.

Un día, gracias a la magia de la tecnología, pude hablar con Helena, y este tema fue mencionado (de hecho ella escribió de esto con anterioridad). Como saben, Helena ya publicó su primera novela, yo en cambio todavía sigo trabajando, hasta poder terminar una de las historias que tengo inconclusas… 

El punto, es que independiente de nuestras diferentes realidades, las dos poseemos un lector ideal; papel que recae en nuestras amigas. Pero esto no significa que ellas juzguen lo que escribimos haciendo vista gorda de nuestros errores. Muy por el contrario, creo que en ambos casos, solo una amiga puede ser completamente sincera con respecto a esto.

Se dicen muchas cosas con respecto al lector ideal; las funciones que cumple, cómo actúa, lo que puede ofrecernos, incluso el tiempo que deberíamos tomarnos para revisar lo que hemos escrito y luego enviárselo a nuestro lector ideal. 

Pero, de forma muy personal, creo que cada una debe tener sus propias reglas con respecto a esto.

Yo tengo una lectora ideal. ¿Ustedes tienen una?

Mi lectora ideal, ha leído toda clase de libros, y a mi parecer, es una persona muy culta con respecto a ese y a otros temas. Pero, yo no la escogí…

“Ella será mi lectora ideal”

No, nunca pensé ni dije algo como eso. Simplemente sucedió.

Como todas las cosas en mi vida, pensé mucho antes de decidirme a escribir algo. Me sentía insegura. Tenía las ganas de escribir y que otras personas me leyeran, pero no tenía la suficiente confianza como para mostrarles a otros lo que había escrito. 

¿Así cómo podría convertirme en escritora? 

Durante un año intenté escribir, siendo yo misma mi única lectora. Luego, alguien me inspiró y me decidí a relatar una historia alternativa con respecto a la vida de esta persona. Y en un punto, simplemente le pedí a ella que leyera lo que había escrito. De seguro han pasado por ese momento, en el que saben que alguien está leyendo lo que escribimos y un montón de sentimientos nos recorren de la cabeza a los pies. Estaba completamente aterrada, pensando que quizás no debería haberle enviado el texto para que lo leyese. Pero, lo cierto es que la experiencia no fue tan mala. Por el contrario, me sirvió para aprender mucho.

Luego de aquella primera lectura que ella le dio a mi historia de aquel entonces, ésta sufrió diversos cambios. Tales como cambio de narrador, e incluso parte de la trama. Mi lectora ideal vio todos esos cambios, teniendo que leer la misma escena contada de dos o tres maneras diferentes. En ese sentido fue muy paciente, y se lo agradezco bastante.

Hoy la historia marcha bien. Los protagonistas, luego de haber enfrentado un duro quiebre en su relación, ahora se están recuperando. Y aunque todavía se perciben problemas en el camino, definitivamente llegarán a un buen final. 

Me he puesto a pensar si es que yo sola hubiese sido capaz de lograr todo eso. A pesar de que incluso ahora no le tengo la confianza suficiente a lo que escribo (créanme que no es falsa modestia), creo que un factor importante me ha permitido el dar vida a mis escritos, y ese factor es: mi lectora ideal. Me veo en la obligación de hacer las cosas bien para que ella pueda leerlas. Ansiosa escribo cada escena, procurando que no se escape ningún detalle, para que luego ella pueda disfrutar el viajar a través de aquellas páginas, y por qué no, también para inspirarla un poco.

Créanme que en este tiempo, la he visto disfrutar, reír, sentir nervios, e incluso emocionarse hasta las lágrimas por aquellos personajes que, sin quererlo, se han ganado un lugar especial. 

Tengo suerte de contar con una lectora ideal a la que puedo confiarle aquellas palabras que procuro dar sentido en un par de páginas. Sé que definitivamente el lector ideal es un apoyo fundamental en la vida de cualquier escritor. Esté en la etapa que esté, creo que todos necesitamos ese apoyo. Alguien que nos diga “no está mal, pero podrías mejorar esto”, o que simplemente nos sonría y nos anime a dar lo mejor de nosotros.

De seguro las que poseen ese lector ideal, entenderán a lo que me refiero. Las que no, pues espero que pronto se enfrenten cara a cara con aquella persona que, sin duda, las ayudará a que este camino sea mucho más entretenido de lo que ya es.


¡Que tengan una buena semana!

Constanza

3 comentarios:

  1. Hola, Constanza:

    Me siento tan identificada con ese temor, esa inseguridad ante el hecho de que otra persona lea aquello que escribo, que te entiendo de verdad.

    Es muy importante confiar en ese lector o lectora ideas, saber que nos va a decir sin tapujos lo que piensa de lo escrito, los errores, lo que le gusta y lo que no, si la historia le engancha, si emociona, si...

    Son tantas las dudas que surgen cuando está escribiendo.

    Estoy segura que tu novela transcurrirá por el camino adecuado y que llegará a buen puerto, de verdad.

    Ah, y espero estar por aquí y recibir la buena noticia: Constanza saca al mercado su primera novela titulada...

    Un saludo, María.

    ResponderEliminar
  2. Constanza, siento las mismas cosas que tú, con la diferencia que mi temor no es que me lean si no, de no encontrar a mi lector ideal. Yo, por ahora, soy la única que me leo y me releo, y, me falta la confianza para pedirle a alguien que lo haga por mí. Espero encontrar esa persona especial en algún momento. mientras tanto, continúo escribiendo.
    Saludos desde Santiago.

    ResponderEliminar
  3. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar