DIANA AL AZEM hoy
nos quiere presentar su novela ESCONDIDOS
ENTRE AULAS. La obra, es su primer proyecto literario, cuya historia surgió
en uno de los institutos donde trabajó como profesora de secundaria. La vida de
profesores y alumnos le dio la idea de escribir una historia de amor que fuera
más allá de la típica relación entre adolescentes, por ello, decidió narrar sobre
un amor entre una profesora y un alumno de último curso.
Aquí tienen la sinopsis:
Raquel es una joven profesora de matemáticas con destino en un instituto de Algezares. Echa de menos tener una relación estable con un hombre que la haga feliz, y para suplantar ese vacío, se refugia en sus clases y sus alumnos. En este nuevo curso, Raquel conocerá a alguien que le desbaratará todos sus planes. Scandar, un alumno conflictivo de último curso, le enseñará el significado del amor y la pasión. Una relación prohibida por el sistema educativo, en la que Raquel y Scandar tratarán de guardar su secreto ante los ojos de profesores y alumnos, ¿pero lo conseguirán?
La novela DIANA
la ofrece por Amazon, en los
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Posee además, su propio booktrailer, que puedes disfrutar en
la siguiente dirección: http://www.youtube.com/watch? v=PxhEE1CXEIk
Dale una oportunidad a esta pareja literaria y a esta nueva
autora.
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Queremos presentarles también, a CÉSAR ELIÉCER VILLOTA ERASO (nicho39@hotmail.com).
Es Licenciado en Lengua Castellana y Literatura de la Universidad de Nariño,
obteniendo tesis Laureada. Catedrático de la Universidad Mariana. Integrante
del Taller de Escritores AWASCA y del Programa radial MORADA AL SUR. Profesor
de la Universidad de Nariño, coordinando la cátedra humanística: Literatura y
Carnaval. Ha publicado ensayo, cuento y poesía en la Revista Awasca, en Caldo
de Lengua y Revista Expresiones. Su nombre ha sido incluido en las Memorias del
VII Recital de Poesía desde el Sur y Revista Urcunina Literaria de Medellín.
Prologuista del libro Carnaval de Piel y Papel de Chucho Peña Coral y Corrector
de Estilo del libro Escultura Ecológica, del maestro Omar Quiroz Velásquez. Sus
obras inéditas son: De oníricas y otros cuentos, Cuentos para una noche y Dexistencias
(Obra poética). Actualmente es Estudiante de Maestría en Etnoliteratura,
Universidad de Nariño.
De cada una de sus obras, CESAR nos regala un escrito:
De Oníricas y otros cuentos:
INESPERADOSabes, lo que extraño de ti,Es mirarte, conversar contigoPor dos minutos o menos,Me contagia tu sonrisa,Y me alegra tu presencia,Pero sabes…Si lo sabes, ¡Adivínalo!S.A.G.Aquella noche llegué cansado del trabajo. Pues estar abrumado por las preguntas de los estudiantes, en más de una clase, terminarían con los deseos y tranquilidades que se me habían otorgado el fin de semana pasado.A eso que se llamaba agotamiento, respondió la idea permanente de la distracción nocturna, así paso: ¡Me puse a jugar! En el aparato de los deseos lectores. Comencé por entrar a Google para revisar uno a uno los correos de propagandas y anuncios de almacenes éxito, Carrefour y Magisterio. Pero al desglosar y digerir más de diez lecturas, pude ver que alguien me había escrito en Facebook, de inmediato pinche click, digité el usuario y la clave -¡Vamos, vamos internet! Rápido, entró por fin…Miré la lista de amigos, unos conocidos, otros no tantos, pero desde que abrí esa ventana de la conversación, solo me quedé mediatizado con un rostro, solo uno. La mirada que ostentaba dignificaría el proceso de la atracción y el valor de las almas que tienen que contarse cosas, símbolos y hasta las risas y no se pueden olvidar las preguntas.Así como lo pensaba, me daba miedo tocar la tecla h, pero la melodía de la canción Senderito de amor de Julio Jaramillo, me ayudó a tomar la decisión, le dije –hola-… pero pasaron varios segundos sin respuesta. Ahora, lentamente los signos se fueron cifrando y dieron una respuesta igualitaria. Entonces la desesperación de un saludo, terminó en convertirse en la oportunidad para hablar de la memoria, que se fue entretejiendo en el Awasca. En la magia de la alegría, la melancolía y los sollozos se fundió un deseo de almas semejantes y cuerpos sonrojados por la veracidad de los actos…Miles de veces miré su perfil, no sé si ella hizo lo mismo. Pero en fin, se me ocurriría decirle muchas cosas más… ¡QUEDO UN VACÍO! Que se terminaría cuando surgió una pregunta inesperada, ¿Puedo Preguntar lo que quiera?? Yo conforme con la situación dije -Si ¿Por qué no? Lo que sea- Ella de inmediato me dijo ¿Me darías un beso? Y como en el lado frío del computador todo puede pasar, cuando estaba a punto de escribir la respuesta, el barrio donde estaba, se quedó sin energía eléctrica
De Cuentos para una noche:
PARCHECITOS Y GARABATOSA Caroline MuñozSe encontraba moribundo, vagabundo, aquel hombre de barba, tez y ojos claros oscuros. Todas las personas lo miraban, pero callaban. Nadie, absolutamente nadie, entendía su proceder y menos su tonto caminar en la playa. Él mismo no lo entendía -¡Qué me pasa!- Por qué caí en este estado de pensamiento -Se preguntaba-, antes de caer en la arena suave. Por eso, todos los días pedía ayuda, pedía auxilio, porque anhelaba tener de su amada, aunque sea pequeños trocitos, pedacitos de amor.Ella, se llamaba Úrsula, diminuta damisela que gozaba de una hermosura profunda, angelical y sensual. Nunca lo había mirado, es más, nunca supo de su existencia. Él, siempre desfallecido y perdido. Ella, el motivo de tan desaforada pasión.Una noche, perdido en el deseo infinito de sus fantasías y alegorías, soñó con los dioses griegos, entre ellos encontró a Cupido, quien al ver tal flagelación le concedió un deseo: ¡Mira tú! Le dijo, mientras lo apuntaba con el dedo, -Comerás del fruto de los deseos, pero a cambio, serás auténtico, serás único-, y al final, cuando Cupido quería insinuarle una verdad sobre su amada, un viento ensordecedor terminó por helarle hasta la materia gris de su alma.Después de un suculento sueño, se levantó aún mas perdido de lo usual y cansado de escuchar toda la noche un cuchicheo en su cerebro, por fin comprendió que era hora de sacar de sus entrañas lo que jamás pensó que hacía parte de su ser. Agarró descuidado al odio, cogió desprevenida a la pereza. La tristeza sucumbió también al igual que la mentira. Y ni siquiera se salvó la alegría, ni la confianza, menos la autoestima, y con todo esos sentimientos encontrados, comenzó a escribir con la fuerza táctil de aquellas sensaciones, hasta que se dio cuenta que le faltaba algo, se le olvidó escribir sobre el amor.Pero eso no le importó. Como pudo, agarró los retazos de ilusión pasada, regazos de aquel misterioso sueño y de su puño y letra, surgió la imagen difusa de unos tristes renglones que anunciaban: Oh dulce néctar, no tengo vida sin tu sabor a miel, mi niña querida, observa mis garabatos, esperando que con ellos me regales, aunque sea, parchecitos de tu amor. E inmediatamente salió corriendo al encuentro de su amada que curiosamente, en ese instante, se encontraba en un balcón. Pero créanme, nada raro en ella, ni siquiera lo miró.De esa manera fue como este pobre hombre enloqueció. Divagó por el mundo sin un sentido y un rumbo fijo, perdido otra vez por eso que creía llamar amor, eso que tanto había buscado terminó por ser una vaga ilusión. Nunca más se supo de sus vigilias y sus pasos vacilantes en aquel lugar. Sin embargo, su amada no tenía la culpa de no haberlo correspondido, porque ella, hasta ese día, a nadie le había contado que era ciega de nacimiento.
De Dexistencias:
CARICIAS PROHIBIDASEn el remanso de sus curvaturasLa arquitectura de un idilio de aromasNació…La huellas de mis dedosSe entrelazan como arañasCapaces de tejer anhelos y desenfrenos.En este juego de cariciasLos labios también hicieron lecturaDe los poros,Que FinalmenteDejan entreverLos espejos y los fantasmasDe los amantes enamorados.
¡Feliz fin de semana!
Jonaira Campagnuolohttp://desdemicaldero.blogspot.com
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